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Quesos del fin del mundo

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Beatriz Chisleanschi

En Ushuaia, la Coope TDF comercializa lácteos, cervezas y otros productos locales. Proyectan generar una cuenca lechera de oveja.

Producto estrella. En el local de Ushuaia los clientes pueden encontrar quesos provenientes de todo el país.

Foto: Lujan Agusti

La Coope TDF, como se presenta en la comunidad, nació hace cuatro años con la intención de producir queso local y ampliar el sector lácteo en Ushuaia. En los inicios no pudieron llegar al objetivo de producir, entonces comenzaron a comercializar y a prepararse para generar, a futuro, una pequeña cuenca lechera de oveja, que es lo que distingue a la Patagonia. 

Producir lácteos en el fin del mundo es todo un desafío. «Al día de hoy solo está la misión salesiana en la ciudad de Río Grande, que cuenta con un staff de alrededor de 70 ovejas frisonas. Se dedican a la producción de queso de oveja», cuenta Mariano Blasón, presidente de la cooperativa. «Nosotros hicimos con los chicos una pequeña producción en casa, incluso fuimos a capacitarnos a cabañas Santa Águeda, en la localidad de Las Flores. Pero no lo pudimos seguir y entonces decidimos comercializar los quesos de los salesianos, de oveja y de vaca. En el camino terminamos siendo más una distribuidora que una cooperativa de producción», relata Blasón quien hasta hace poco fue secretario de Economía Popular del Gobierno de Tierra del Fuego.


Lazos solidarios
Sorprendidos por el interés que despertaban los quesos, sin darse cuenta, los integrantes de la cooperativa se constituyeron en un nexo importante con otras provincias y ciudades. Se contactaron con la Red de Alimentos Cooperativos, la cual integran, lo que les permitió ampliar los productos que venden, incluso incorporar carne, que es la última novedad del local. «De todas formas, nuestro producto estrella es la línea de quesos y de varios tipos de pastura: de Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires», cuenta con entusiasmo Blasón, nieto de abuelo cooperativista. 

Cuando se acercaron a la Red de Alimentos Cooperativos se dieron cuenta de que no eran los únicos locos, «sino que había un montón de locos más», narra risueño Blasón. Y agrega: «Para mí es un modelo educativo que fomenta en los pibes y en las pibas que hay una nueva forma, diferente a las de consumo masivo, en estos ecosistemas de economía». De hecho, la idea de ser una cooperativa estuvo desde los inicios, cuando eran seis los integrantes del proyecto (actualmente son ocho). «Pensamos, en vez de ser monotributistas o autónomos, ¿por qué no unificamos esa fuerza y capitales? Y en vez de ser uno el jefe o empresario, nos constituimos todos en empresarios de esta cooperativa».

Clave. Asociarse en cooperativa permitió a los emprendedores expandirse y crecer en su rubro.

Foto: Lujan Agusti

La nota se realiza en horas previas a un partido de la Selección argentina de fútbol y los pedidos de picadas no cesan. «Las picadas las creamos nosotros, no es lo que nos sobra de los quesos y los fiambres. Y los días que juega Argentina tenemos un montón de pedidos», relata entusiasta Blasón.

Con la premisa del sector de que «siempre tiene que haber un 30% de queja y 70% de trabajo», siguieron buscando alianzas y nuevos horizontes. Fue así que, a principios de enero, se asociaron a la cooperativa cervecera Birra Tierra del Fuego, integrada por productores de cerveza de la región. «Lo que hicimos fue instalar cuatro canillas. La gente puede pasar y servirse una pinta, cargar una botella o llevarse una lata», explica el presidente de la cooperativa.

Pero además de «birra al paso», en el lugar se pueden consumir pizzas de la cooperativa Nuevos Sabores, que también produce pan y que la Coope distribuye, a su vez, a otros lugares. Asimismo, la participación en ferias populares les hizo aumentar la masividad del consumo de sus productos. 

Y además de la atención en su local abrieron puentes como el que establecieron con el gremio no docente de la Universidad Tecnológica Nacional, a quienes les brindan un servicio provisión de quesos, fiambres y dulces. En mayo de este año comenzaron también a organizar la Federación de Cooperativas de Tierra del Fuego.

«Parece una pavada, pero nosotros estamos en un barrio y la mayoría de nuestros clientes vienen a buscar la amabilidad con que los atendemos. Hacemos todo muy cara a cara. Estoy convencido de que la solidaridad y la ayuda mutua son el camino», concluye Blasón con orgullo. 

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