3 de octubre de 2023

Emiliano Basile

Puan
Directores: María Alché y Benjamín Naishtat
Intérpretes: M. Subiotto, L. Sbaraglia, J. Zylberberg, A. Flechner, C. Banegas, A. Frigerio.
País: Argentina

Codirigida por María Alché (Familia sumergida) y Benjamín Naishtat (Rojo), la película narra las vicisitudes de Marcelo Pena (notable trabajo de Marcelo Subiotto), un destacado profesor de la materia Filosofía Política en la emblemática Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, ubicada sobre la calle Puan. Ante la inesperada muerte de su mentor, Pena asume que heredará la posición de titular de la citada cátedra. Sin embargo, el conflicto se desencadena cuando Rafael (Leonardo Sbaraglia), un carismático y laureado docente con ideas renovadas sobre la filosofía, regresa de Alemania listo para competir por el puesto vacante. La titánica tarea de rendir homenaje al fallecido titular recae en el errático protagonista, que asume el compromiso mientras su vida cotidiana se desmorona.
Puan es una divertida comedia agridulce que tiene la capacidad de abordar múltiples temas en torno al conflicto interno de su protagonista. Este hombre experimenta una crisis de identidad luego de haberse moldeado a imagen y semejanza de su «maestro», una posición que mantuvo durante años y que ahora debe reconsiderar para encontrar su propio camino. Y eso queda expuesto en el relato a través de una serie de escenas humorísticas que narran su búsqueda, con intentos fallidos por resistirse a un cambio de ideas que parece haber llegado para quedarse. Estas situaciones se presentan en diferentes secuencias que, al final, se cierran con un efecto de «iris», una transición que proviene del cine mudo y que divide a la película en segmentos, como si se tratara de una serie de sketches.
Estamos ante otra muestra de la capacidad de Naishtat y Alché para manifestar una posición político-ideológica desde la cual observar la realidad. Por ello, la película también aborda los detalles cotidianos de la experiencia de ser docente universitario en Argentina, con problemáticas inherentes a la profesión. Se describe la escasez de recursos y presupuesto, los retrasos en el pago de salarios, la burocracia relacionada con la organización de los concursos de cargos y las estrategias que los profesores deben emplear fuera del ámbito académico para mantener su dignidad a nivel económico (el tema se resume magistralmente en la escena con Andrea Frigerio). Y, entre otros aspectos, también se aborda la cuestión del reconocimiento social basado en la mediatización de la persona antes que en sus capacidades y principios. Además, se presenta una descripción satírica del estilo de vida y los intereses progresistas que rodean al protagonista, como en el trabajo social que realiza en barrio populares, que también quedan reflejados en su esposa Vicky (Mara Bestelli), una activista feminista.
Quien haya pasado alguna vez por la verdadera Puan, como se denomina en la jerga estudiantil a la universidad de Filosofía, sabe que la politizada facultad es un microuniverso fascinante y, a la vez, un caos en permanente ebullición. Desde la perspectiva del docente se transmite esa olla a presión con una frescura y una pasión que enaltecen los valores y principios fundantes de la institución. Una toma de posición frente a los conflictos externos (que se mantendrán fuera de campo, aunque escuchemos constantemente los sonidos), hasta el momento en el que la realidad irrumpe en el seno de la vida académica, y la teoría de las aulas se convierte finalmente en acción.

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