22 de julio de 2022
La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación reclamó ayer que el presidente del Grupo Ledesma, Carlos Blaquier, y su director, Alberto Lemos, sean llevados a juicio por el papel que tuvo esa firma durante «La Noche del Apagón», como se conoce a las jornadas de julio de 1976, durante la última dictadura cívico-militar, en las que fueron secuestradas cientos de personas en las localidades jujeñas de Libertador General San Martín, Calilegua y El Talar. «La responsabilidad de la empresa y sus dueños todavía no se logró juzgar. Las madres y familiares de las víctimas de los apagones marcharon incansablemente en reclamo de justica», indicó el organismo que conduce Horacio Pietragalla Corti a través de un video publicado en su cuenta de Twitter.
Entre el 20 y 27 de julio de 1976 las fuerzas represivas provocaron cortes de luz en las localidades jujeñas de Calilegua, El Talar y Libertador General San Martín, donde se encuentra la fábrica central de Ledesma. «En la oscuridad comenzaron a buscar casa por casa a trabajadores de Ledesma, sindicalistas, estudiantes y militantes políticos», describieron desde la secretaría de Derechos Humanos sobre la semana en la que fueron secuestradas cientos de personas, de las que alrededor de 30 aún continúan desaparecidas.