26 de julio de 2022
El papa Francisco pidió perdón a los pueblos indígenas de Canadá por los asesinatos, las violaciones y abusos cometidos contra los niños de los pueblos indígenas que, desde 1881 hasta 1996, fueron separados de sus familias y llevados por la fuerza a las escuelas católicas. Este fue el mecanismo esencial de la llamada «asimilación cultural» que el papa calificó de «malvada» y de «error desastroso». «Lo siento, pido perdón, en particular, por la forma en que muchos miembros de la Iglesia y de las comunidades religiosas cooperaron, sobre todo a través de su indiferencia, en proyectos de destrucción cultural y de asimilación forzada promovidos por los gobiernos de esa época, que culminaron en el sistema de internados escolares», manifestó el Pontífice. Los pueblos originarios y la Comisión de la Verdad, exigían una disculpa por parte de la Iglesia ante los abusos de las escuelas que arrancaron a aproximadamente 150.000 niños de sus familias para imponerles educación católica y castigarlos por hablar sus lenguas o mantener sus costumbres.