28 de enero de 2015
Crecen las protestas contra el nuevo Régimen Laboral Juvenil impulsado por el gobierno de Ollanta Humala. El rechazo a la «ley pulpín», bautizada así en referencia una marca de jugo infantil que se identifica popularmente con la falta de experiencia mundana por parte de ciertos adolescentes, creó un movimiento de jóvenes y sindicatos peruanos que vienen saliendo a la calle a decirle «no» a la precarización laboral. La última movilización, en el centro de Lima, fue duramente reprimida por la policía. «Se les dijo a los jóvenes que se estaban aliando con el diablo», llegó a declarar el ministro del Interior, Daniel Urresti, en referencia a los gremios de izquierda. La ley permitirá contratar a empleados de entre 18 y 24 años para realizar las mismas tareas que el resto de los trabajadores pero con menores sueldos y beneficios.