27 de noviembre de 2013
«El catastrófico descenso de los partidos políticos ha coincidido con un formidable ascenso de las organizaciones no gubernamentales (ONG). He descubierto que es más fácil sumar a los jóvenes a una ONG para salvar las mariposas que a un partido político, lo cual es desastroso para la democracia. Las democracias no pueden estar basadas en ONG, tienen que estarlo en partidos políticos.»