1 de julio de 2025
Con reservas flacas en el Banco Central, las salidas de argentinos al exterior no hacen más que agravar el panorama cambiario nacional. Nueva medición de servicios en moneda estadounidense.

No voy en tren. El 41,6% de los turistas residentes salieron del país por vía aérea.
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En un momento de flaqueza de reservas, descontando todas las obligaciones de deuda que enfrenta el Banco Central, la dinámica turística que deriva de un dólar barato profundiza la restricción cambiaria. Los viajes a Miami o a Chile de compras, rémoras de los noventa, crecen, junto con los consumos importados. El saldo de abril fue el tercero en el podio de los de mayor turismo emisivo desde inicio de la serie (2016), solo superado por 2017 y 2018, pleno macrismo. Las salidas al exterior incluyeron a 1.425.600 visitantes residentes por todas las vías internacionales, de los cuales 881.200 fueron turistas y 544.400 excursionistas. Del total del turismo emisivo, el 77% viajó a países limítrofes, 26,8% a Brasil, 24,6% a Chile y 11,5% a Paraguay.
El fuerte dinamismo de los primeros meses del año amplifica esta tendencia. En el primer cuatrimestre se registró un récord histórico de turismo emisivo, con casi 6 millones de salidas al exterior. De acuerdo con datos del INDEC, en el primer cuatrimestre salieron del país 8,4 millones de personas, entre turistas (5,9 millones) y excursionistas (2,4 millones). Mientras que el saldo de abril, según cifras del informe cambiario del Banco Central, mostró un egreso neto de dólares para gastos por viajes, pasajes y otros consumos efectuados con tarjetas con proveedores no residentes por US$ 765 millones. El panorama se completa con los datos de la balanza de pagos del primer trimestre de 2025, que en el rubro Viajes, mostró un saldo negativo de US$ 3.464 millones, US$ 2.755 mayor que en el mismo trimestre del año pasado. «El resultado se explicó principalmente por el aumento tanto de la cantidad como del gasto promedio de viajeros residentes en el exterior», sostiene el INDEC. Para hacerse una idea del costo en las reservas del Central, el saldo comercial (exportaciones menos importaciones) fue en abril de apenas US$ 210 millones, según el mismo INDEC. El saldo positivo de bienes casi desapareció en los últimos meses, a pesar de un nivel de actividad que dista de ser explosivo, lo que suma fragilidad a las cuentas externas. «En algunos rubros, las cantidades importadas están casi en máximos, sobre todo los bienes de consumo, hecho que de algún modo se disimula por la caída de los precios de importaciones desde la pandemia en adelante», señala un informe de la consultora lCG.
Esquema insustentable
En abril ingresaron 699.300 visitantes no residentes por todas las vías de acceso al país, de los cuales 418.800 fueron turistas y 280.500 fueron excursionistas. El 18,7% del turismo receptivo reside en Uruguay; el 18,5%, en Brasil; y el 15,0%, en Europa. El 45,2% de los turistas no residentes llegó a Argentina a través de la vía aérea; el 42,9% lo hizo por vía terrestre; y el 12,0% restante arribó por vía fluvial/marítima.
Por su parte, el 51% de los turistas residentes salieron del país por vía terrestre; el 41,6% lo hizo por vía aérea; y el 7,5% optó por la vía fluvial/marítima. Como resultado, en abril se registró un saldo negativo de 726.300 de visitantes internacionales por todas las vías de acceso al país. Este resultado se desprende de los saldos negativos de 462.400 turistas y de 263.900 excursionistas.

Desbalance. En el primer cuatrimestre del año, el turismo emisivo creció 67,6% interanual, contra uno receptivo que cayó 25,4%.
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El «veranito cambiario» se refleja en las cuentas de reservas del Banco Central. El Sector Privado no Financiero fue comprador neto de moneda extranjera por US$ 1.856 millones en el mercado de cambios. Dicho resultado, fue en gran parte explicado por la formación de activos externos de las Personas humanas, que ascendió a US$ 2.247 millones. Y también registraron egresos netos en concepto de gastos por viajes, pasajes y otros consumos efectuados con tarjetas con proveedores no residentes por US$ 765 millones. Respecto de la cuenta de Viajes, pasajes y otros pagos con tarjeta, no debe asociarse únicamente a los gastos por viajes ya que, en los giros que se hacen al exterior para cancelar los saldos con las empresas emisoras de tarjetas internacionales, se incluyen tanto los consumos que se realizan por viajes al exterior como las compras no presenciales de bienes y servicios a proveedores del exterior.
El desequilibrio acumulado es de US$ 9.300 millones desde enero de 2024, de acuerdo a datos oficiales. Es en este contexto, que el gobierno busca cambiar la manera en que se presentan los números de gastos e ingresos de divisas por turismo, escudado en la creencia de que el déficit de dólares por esta vía es más bajo que lo que muestra el balance cambiario del Banco Central. En consecuencia, la autoridad monetaria buscará diferenciar el uso de tarjetas en el exterior del pago de servicios en dólares que se hagan desde Argentina, también con plásticos.
En la Secretaría de Turismo que conduce Daniel Scioli aseguraron que ese área acordó con el Banco Central que a partir de julio –que dará a conocer los datos de mayo– el informe de balance cambiario diferencie, por un lado, los gastos hechos por turistas argentinos en otros países y, por otro, gastos corrientes en divisas. Ejemplifican, en ese plano, el pago de suscripciones mensuales de plataformas digitales.