24 de mayo de 2022
Un informe de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia reveló el control del mercado a cargo de cuatro empresas, integradas verticalmente.
Loma Negra. La firma integra el complejo cementero nacional junto con Cementos Avellaneda, Holcim y Petroquímica Comodoro Rivadavia.
GUIDO PIOTRKOWSKI
La Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) reveló los resultados de una investigación que llevó adelante sobre precios y posible cartelización de empresas cementeras. La muestra releva el período julio 2017-junio 2018 y solo en ese año el abuso de posición dominante derivó en un sobrecosto acumulado de 178 millones de dólares, concluyen desde la CNDC.
El complejo cementero argentino está compuesto por cuatro empresas: Cementos Avellaneda (CASA), Holcim, Loma Negra y Petroquímica Comodoro Rivadavia (PCR). Las cuatro firmas cementeras del país están integradas verticalmente; es decir que las tres etapas de la cadena de valor –producción primaria, etapa industrial y comercialización mayorista– son llevadas adelante por las mismas empresas, que poseen canteras, plantas de procesamiento y centros de distribución y logística. De acuerdo con la reciente investigación de mercado, en la cual se analizaron las condiciones de competencia en el sector, la CNDC concluyó que las empresas cementeras ejercen un poder de mercado localizado generando un sobrecosto para la industria de la construcción en su conjunto, tanto para el sector privado como para la obra pública. La participación de cada firma en el total de toneladas de cemento vendidas a nivel nacional se ha mantenido relativamente estable en el período analizado. La principal empresa es Loma Negra, que concentró el 45,6% de las ventas de cemento, seguido de Holcim (28,2%), CASA (22,3%) y PCR (3,8%). Desde el punto de vista de la competencia, el sector cementero presenta algunos elementos que facilitan la coordinación entre empresas y no favorecen un entorno competitivo. En Argentina existen solo cuatro empresas, el intercambio comercial argentino de cemento es marginal y las importaciones son prácticamente nulas.
Recomendaciones
La CNDC efectuó recomendaciones a la Cámara que agrupa a las empresas cementeras de la República Argentina (AFCP) con el propósito de limitar el intercambio de información relevante entre competidores. Por su parte, «analizará el curso de acción con relación a las conclusiones que se derivan del presente informe», informó la Comisión. «La existencia de elevados costos de transporte y la disponibilidad de información de sus competidores –entre otras variables que caracterizan a la industria– permitió, al menos desde 2013 y hasta 2018, que las distintas empresas cementeras ejerzan un poder de mercado localizado geográficamente», detalló la investigación de la entidad de Defensa de la Competencia. De acuerdo con el informe de la entidad que vela por la competencia empresaria, este poder de mercado se tradujo en un sistema de discriminación de precios en función de la distancia de cada uno de sus clientes a la planta competidora más cercana. De tal manera, el precio abonado por cada cliente dependió en gran medida de la presencia de una planta competidora cercana. Por ejemplo, los mayores precios –por encima del promedio que mide el índice de costos de la construcción– se registraron en Jujuy, con un sobreprecio del 25%, seguido por Salta (18%), Chubut (30%) y Santa Cruz (65%).
Con respecto a los costos de producción del cemento, y de acuerdo con la información suministrada por las empresas, alrededor de un 40% de los costos corresponde a insumos que se importan o podrían importarse, o bien su precio en el mercado local está expresado en dólares. Por ejemplo, la provincia de Buenos Aires exhibe los precios del cemento más bajos del país (un 8,3% por debajo del promedio nacional). Una posible explicación es que en dicha provincia existe una importante demanda de cemento, siete plantas de producción divididas en tres empresas (Loma Negra tiene cinco plantas, y Holcim y CASA, una planta cada una) y, por lo tanto, cierto nivel de competencia entre las firmas. «En línea con los estándares internacionales y con los propios lineamientos de la CNDC, se recomendó el cese de la solicitud, recepción y distribución de información sobre producción y despacho de cemento desagregada por provincia y con una antigüedad menor a doce meses», concluye el documento de la CNDC.