10 de octubre de 2024
El Gobierno logró sostener con lo justo el freno presidencial a la ley. Los sindicatos docentes y no docentes y las agrupaciones estudiantiles anticipan que el reclamo se sostiene.
Sesión. Una amplia mayoría de 160 legisladores se pronunció en contra del veto, pero no alcanzó para revertirlo.
Foto: NA
«Repudiamos a las y los diputados que votaron en contra del mandato popular de defender la universidad», dijeron desde el Frente Sindical de Universidades Nacionales al conocerse el apoyo legislativo al veto de Milei. Además, convocaron a un paro total para este jueves 10 y llamaron a consolidar el plan de lucha en defensa del salario y el presupuesto universitario.
«La voluntad popular ha sido defraudada y la democracia ha cedido al manejo antirrepublicano de gobernar por decreto del Gobierno Nacional. Se conformó una alianza política que es incapaz de conmoverse ante el sufrimiento de las grandes mayorías, ante el reclamo de todos los sectores por sostener aquello que es fundamental: la universidad pública, la educación pública», expresaron desde el Frente, integrado por Conaduh, Fedun, Conadu, CTERA, Fagdut y UDA. «Este Frente Sindical manifiesta nuevamente la voluntad de luchar para defender la universidad pública, la salud y la educación pública, las jubilaciones dignas, por niñeces protegidas y por un país igualitario. Universidad pública de calidad para nuestro pueblo y salarios dignos para docentes y no docentes que la sostienen», concluyeron.
Clases públicas
La lucha de los sindicatos docentes y no docentes está siendo acompañada por la comunidad educativa en su conjunto. Esta semana hubo clases públicas en muchas facultades y también se decidieron tomas de algunas Casas de Altos Estudios como la de Filosofía y Letras, Psicología, Sociales, Veterinaria y Ciencias Exactas de la UBA, facultades de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), así como de la Universidad de San Martín y de Tres de Febrero, de la Universidad Nacional de las Artes (UNA), de la de José C. Paz (UNPAZ), de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo), de la de San Luis (UNSL), de la la Universidad Nacional de Jujuy (UNJu), de La Pampa (UNLPam), de Tucumán, de Salta y de la Universidad Nacional de la Patagonia Austral (UNPA). Los y las estudiantes también decidieron la toma del Colegio Nacional Buenos Aires.
Luego de varias semanas de negociaciones entre los y las legisladoras, finalmente el Gobierno sostuvo su veto con 84 votos positivos. Del bloque oficialista, conducido por Gabriel Bornoroni, sus 39 diputados votaron a favor del veto, solo Lourdes Arrieta, ahora en monobloque, votó en contra. Mientras que, en las inmediaciones del Congreso, agrupaciones sindicales y estudiantiles se manifestaban en contra del veto, adentro del Palacio Legislativo, en una sesión que duró cuatro horas y mantuvo en vilo a gran parte del país, el Gobierno consiguió el apoyo necesario para que se mantuviera. La oposición no llegó a los dos tercios de legisladores (requería 166 y alcanzó 159) para dar de baja el veto a la ley de presupuesto universitario. Hubo cinco abstenciones y ocho ausencias.
Salarios con pérdidas del 50%
El 13 de septiembre, con 57 votos a favor, 10 en contra y una abstención, la Cámara de Senadores había aprobado el proyecto de Ley de Financiamiento Universitario para 2024. Antes, Diputados había hecho lo propio por amplísima mayoría. Minutos después de la sesión del Senado, el presidente escribió en la red social X que vetaría la norma y fue lo que hizo. El proyecto obligaba al Poder Ejecutivo Nacional a restaurar desde el 1° de enero de este año hasta el mes en que se sancionó la ley, las partidas que corresponden a la asistencia financiera universitaria y a los hospitales públicos que dependen de las universidades, así como de las actividades de ciencia, técnica y extensión. Por otra parte, actualiza bimestralmente los salarios de los docentes y no docentes del sistema universitario nacional de acuerdo con el índice de inflación del Indec.
En la calle. Clase pública en la Facultad de Psicología de la UBA. Las protestas continuarán.
Foto: Valeria Ruiz
Durante este año, los salarios docentes y no docentes perdieron un 50% de poder adquisitivo y un 85% de los docentes cobran salarios por debajo de la línea de pobreza. Hasta 2022, de 2.540.673 alumnos y alumnas universitarias, 2.030.463 pertenecían a universidades e institutos públicos. En Argentina hay 61 universidades públicas, regidas por el Consejo Universitario Nacional (CIN). Según los datos disponibles, hasta 2022, casi el 48% de los nuevos inscriptos en universidades e institutos universitarios nacionales y provinciales de la Argentina eran primera generación de universitarios en sus familias.
«Agradecemos a la sociedad argentina que se moviliza cada vez que la historia toca a su puerta», había dicho Piera Fernández, presidenta de la Federación Universitaria Argentina (FUA) el 2 de octubre cuando centenares de miles de personas se movilizaron en todo el país en defensa de la educación pública, gratuita y de calidad.
Tras la sesión en Diputados, como viene siendo habitual, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, desplegó su show represivo en modo cacería y las fuerzas de «seguridad» atacaron a periodistas y manifestantes sueltos cuando ya la manifestación en las afueras del Congreso estaba terminada.
