28 de agosto de 2021
Entre julio y septiembre de 2020, más de 300.000 hectáreas de la provincia de Córdoba fueron devastadas por una serie de incendios forestales. Este año, los primeros focos de magnitud se desencadenaron en Potrero de Garay y en Calamuchita, donde arrasaron más viviendas que en los incendios pasados. En un solo día, se quemaron entre 80 y 90 casas en la zona de Potrero de Garay. «En 2020, que fue bravísimo, fueron 30 viviendas, pero en todo el año», señaló Diego Concha, director provincial de Defensa Civil. Se necesitaron cuatro aviones hidrantes y bomberos de seis cuarteles para apaciguar los focos que, si bien dos días después fueron desactivados, la situación continúa siendo crítica, «con muchos puntos calientes», señaló Alfonso Mosquera, ministro de Seguridad de la provincia, producto de la conjunción de la alta temperatura (superiores a los 33°), fuertes vientos (provenientes del norte que favorecieron la propagación de las llamas) y de la prolongada sequía. Cabe aclarar que hasta mediados de agosto, se habían quemado 2.100 hectáreas en Córdoba.
Llamas. El fuego arrasó casi 100 viviendas.
NA
