17 de octubre de 2018
María Viera sufrió el asesinato de su hijo Fabián, en 2010, la absolución de 11 de sus asesinos ‒todos policías bonaerenses‒ en 2013 y, días atrás, un grupo paraestatal embistió con una camioneta reiteradamente la puerta de su casa de Mariano Acosta, partido de Merlo, según denunció en una conferencia de prensa frente a los tribunales de Morón. Por otro lado, la «mano de obra ocupada» rompió a culatazos la cabeza del testigo Daniel Mancini a quien, además, se le disparó cuatro tiros muy cercanos, en el marco del nuevo enjuiciamiento a los uniformados, en un intento por «desalentar» su testimonio. El policía federal que «cuida» a Viera se había retirado a cenar a las 21 horas del pasado 12 de octubre y recién sació su hambre las 4 de la madrugada del día siguiente. Hasta el momento, ningún juez o fiscal investigó ni sancionó nada.