6 de marzo de 2013
La intendenta de Cinco Saltos, Liliana Alvarado, vetó la ordenanza que
prohibía la actividad de explotación no convencional de gas y petróleo (fracking) en el ejido municipal por considerar que los concejales «se excedieron en sus atribuciones» cuando la aprobaron, y que la actividad «puede ser compatible con un desarrollo sustentable». La ciudad se había convertido en el primer municipio latinoamericano libre de fracking, considerado contaminante para acuíferos y napas.
El gobernador Alberto Weretilneck respaldó públicamente la decisión de Alvarado por entender que el gobierno provincial y el nacional son quienes fijan las políticas extractivas del recurso.