31 de octubre de 2018
Teherán. Aficionadas en el Azadi Stadium. (STR/AFP/Dachary)Después de 38 años, un grupo de mujeres iraníes pudo asistir a un partido disputado por el seleccionado masculino de fútbol en su país. Pese a tratarse de un número limitado, la presencia femenina en el amistoso ante Bolivia constituye un avance teniendo en cuenta que sigue vigente la ley que les impide a las musulmanas acceder libremente a los estadios donde se celebran partidos entre hombres. El presidente Hassan Rohani impulsa gestiones para el regreso de las mujeres, aunque sectores ultraconservadores del clero mantienen su rechazo con el argumento de preservarlas de las «conductas vulgares» del fútbol. Carlos Queiroz, técnico de Irán, destacó el apoyo y dijo que puede ser «el comienzo de una nueva era».