24 de diciembre de 2024
Milei. Para el presidente, el suyo es «el mejor Gobierno de la historia».
Foto: NA
A lo largo del mes final de 2024 el Gobierno nacional continúa desplegando una estrategia comunicacional consistente en desparramar triunfalismo ante la opinión pública sobre los resultados de su primer año de gestión. No trepida en caracterizarse como «el mejor Gobierno de la historia», soslayando que su política económica basada en un fuerte ajuste se fue transformando en una fábrica de pobres e indigentes y genera la mutilación de la clase media vulnerable.
Las interpretaciones del presidente y sus funcionarios son acompañadas por los editorialistas principales de los medios de comunicación. En realidad, esa narrativa es discutible, teniendo en cuenta el resultado de la gestión en términos sociales, ya que tanto el sector asalariado formal e informal, como los jubilados y las clases medias, así como las pymes –principales generadoras de trabajo–, han sufrido un claro deterioro en sus ingresos. A lo que se agrega una política de incremento de las tarifas y de los precios, impulsados por las corporaciones luego de la devaluación del 118% ejecutada en diciembre del año, que erosiona la vida de los distintos sectores de la sociedad.
Ganadores
Cierto es que el Gobierno se apoya en el tradicional alivio psicosocial de la baja de la inflación junto con algunas cuestiones macroeconómicas, como el «veranito cambiario» que se sostiene por la bicicleta especulativa que denominan amablemente «carry trade», el ingreso de divisas extra generado por el generoso blanqueo de capitales, y la recuperación de la cosecha luego de la gran sequía del año anterior.
En los últimos días, además, el establishment manifestó un apoyo muy explícito, particularmente en la reunión de la Asociación Empresaria Argentina (AEA), en la que en una calificada mesa del grupo de los seis empresarios más poderosos se expresó el reconocimiento de la entidad «por los resultados exitosos de la gestión». No podía ser de otra manera ya que el cuadro de resultados de esas empresas refleja la obtención de grandes ganancias en este período.
Ajuste. Los jubilados y jubiladas sufrieron un deterioro de sus ingresos desde diciembre de 2023.
Foto: Jorge Aloy
Donde prefieren no incursionar los popes de la AEA es en la disputa entre las representaciones políticas de la derecha, el PRO macrista y La Libertad Avanza. Ambas fracciones están atrapadas entre su pertenencia natural al poder de las corporaciones capitalistas y su enfrentamiento por el reparto del aparato burocrático del Estado.
La trifulca va adquiriendo ribetes escandalosos ya que se tiran con «carpetazos» que desnudan hechos de corrupción de unos y otros y, como ya es un clásico, solo se menciona a los corrompidos, ya que de los corruptores de esos latrocinios no se debe hablar.
Amenaza
Otra novedad importante ocurrida en los últimos días es la emisión de un decreto que otorga facultades a las Fuerzas Armadas para intervenir en la seguridad interior, lo cual no solo es anticonstitucional, sino que evidencia una clara amenaza al sistema de convivencia democrático instaurado hace más de 40 años.
Otro elemento a tener en cuenta en ese sentido es la intención de nombrar jueces de la Corte Suprema de Justicia en Comisión, vía decreto, eludiendo el rol constitucional del Congreso Nacional, el cual viene siendo soslayado por el Ejecutivo desde el inicio de la gestión Milei. En suma, estos hechos –y algunos más– demuestran un deslizamiento hacia un deterioro de la calidad de nuestra democracia.
Para las fuerzas políticas nacionales, populares y progresistas se abre un gran reto en 2025, año electoral, que es el de constituir un amplio frente político, social y cultural opositor que se nutra de las diversas energías de la sociedad, tanto de los sectores del trabajo, como de la cultura, los universitarios, los feminismos, las organizaciones de humanos, entre otros.