Opinión

Juan Carlos Junio

Dirigente cooperativista

La participación como alternativa

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Plaza de Mayo. Masiva convocatoria de un centenar de organizaciones por el 17 de Octubre.

Foto: Télam

El hecho político más significativo de esta semana son las convocatorias a los diversos actos celebratorios del 17 de Octubre. Un primer punto a analizar es que se realizaron al menos tres, lo que evidencia que no hay un bloque unido de los núcleos que constituyen el Frente de Todos.
Es remarcable que un grupo de sindicatos tradicionales y poderosos, liderado por Héctor Daer y Carlos Acuña, tomaron una llamativa decisión de concentrarse en un salón cerrado, en Obras Sanitarias, para discutir una estrategia de candidaturas electorales. Por su parte, el Movimiento Evita realizó un acto en La Matanza. Y el más importante, no solo por el simbolismo que vincula a la Plaza de Mayo con el 17 de Octubre, sino también por su masiva concurrencia, fue convocado por más de un centenar de organizaciones sociales, gremiales, políticas y de derechos humanos. Este conglomerado, integrado entre otras agrupaciones, por el Frente Sindical para el Modelo Nacional, encabezado por uno de los secretarios generales de la CGT, Pablo Moyano; la Corriente Federal de los Trabajadores, las dos CTA y el Partido Justicialista de la provincia de Buenos Aires, expresa en el documento presentado en el acto que apoya al Gobierno nacional y a su vez reclama una reforma tributaria progresiva, controles de precios, una reforma judicial y otras políticas de signo nacional y popular. Estas peticiones se compadecen con la consigna bajo la que se realizó la convocatoria: «Unidad nacional por la soberanía y la justicia social».

La puja distributiva
Simultáneamente, se anuncian esperadas medidas económicas teniendo en cuenta que la gestión del ministro Sergio Massa ha tenido resultados positivos en materia macroeconómica, aunque sin embargo sigue postergado el tema del control de la inflación. En este punto, el índice inflacionario que se prevé para octubre se mantiene en un rango alto, similar a los meses anteriores. Todo lo cual continúa generando deterioro en los ingresos de trabajadores, clases medias y particularmente de los sectores más humildes.
El epicentro sigue siendo el de las remarcaciones de la industria de alimentos. Según estudios de distintas consultoras, difundidos estos días, en las dos primeras semanas del mes ya se registran en este rubro aumentos superiores a septiembre. Alrededor de esta temática crucial hay un debate ideológico de fondo: ¿cuál es el verdadero causante del aumento de precios? En nuestra opinión se trata esencialmente de puja distributiva, y en ese contexto las principales responsables son las 25 empresas monopólicas, tanto locales como extranjeras, grandes formadoras de precios. Esta es la causa y no otras cuestiones macroeconómicas, tal como plantea el enfoque neoliberal, que señala como las causas inflacionarias la emisión monetaria y el déficit fiscal.
Continuando con la política ya establecida en la materia el ministro Massa anunciará una suba del piso desde el cual se tributa para aliviar la situación del pago del Impuesto a las Ganancias de los trabajadores. También se implementará el esperado bono para los sectores más vulnerables que no reciben otras ayudas del Estado. Se trata, en definitiva, de ciudadanas y ciudadanos que seguramente son quienes nutren el indicador de indigencia, es decir, a los que no les alcanzan sus ingresos para alimentarse. En otro orden, se pondrán en marcha una serie de beneficios crediticios en el marco del programa Ahora 30, para favorecer el consumo de ciertos productos como televisores con tecnología 4K, equipos de aire acondicionado y teléfonos celulares.
En definitiva, mientras se libra esa puja en el terreno económico, el protagonismo y la participación popular les dan sentido a la democracia. La experiencia histórica demuestra que cuando la sociedad se expresa, los rumbos económicos y políticos pueden ser influenciados por esa participación. Esas voces, las que se hacen oír en calles y plazas, deben ser tenidas en cuenta para encarar los trascendentes desafíos que plantea este período crucial del país. 

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