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La educación en la calle

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Inés Hayes

Docentes de todo el país realizarán un paro de 48 horas y una nueva marcha federal en reclamo de una ley de financiamiento y salarios dignos. El impacto de una crisis que pone en riesgo a todo el sistema.

En lucha. Como en abril de 2024, la universidad se moviliza este jueves 26 frente al Palacio Pizzurno.

Foto: NA

Los docentes universitarios argentinos nunca estuvieron tan mal pagos como ahora. En una conferencia de prensa realizada este lunes 23 en la sede del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), que nuclea a los rectores de las 61 universidades nacionales, Francisca Staiti, secretaria general de CONADU Histórica, dijo que la pérdida salarial se aproxima al 100%. Esta semana se llevará a cabo un nuevo paro de 48 horas (jueves y viernes), pero también se hará una nueva marcha federal. La conferencia fue convocada por el Consejo Interuniversitario Nacional, el Frente Sindical de Universidades Nacionales (CONADU, CONADU Histórica, FEDUN, CTERA, FAGDUT, UDA, FATUN) y la Federación Universitaria Argentina (FUA).

 «No tenemos respuestas en relación a las obras paralizadas o a los pedidos de actualización de becas estudiantiles. Además, la situación del sistema científico es muy grave, porque prácticamente todo el financiamiento está cortado. Si esto no se modifica, tendremos dificultades reales para seguir funcionando; por eso pedimos al Congreso una ley que nos dé una respuesta», dijo Oscar Alpa, rector de la Universidad Nacional de La Pampa (UNLPam) y presidente del CIN, durante la conferencia. 

«Nuestros compañeros atraviesan una situación familiar muy grave, que lamentablemente está llevando a un vaciamiento en el sentido de las renuncias y licencias, afectando directamente el funcionamiento de las universidades», agregó Francisca Staiti, docente universitaria de Mendoza. 

Durante la conferencia también tomaron la palabra los referentes de las restantes federaciones docentes y no docentes, quienes sumaron sus voces en la demanda de una solución urgente a la crisis del sistema universitario. Desde los distintos sectores se enfatizó en la necesidad de que el Congreso Nacional le dé tratamiento urgente al proyecto de Ley de Financiamiento universitario. «Este 26 de junio, debemos movilizarnos en cada universidad y en cada rincón del país, en defensa de la educación pública y de una universidad que tenga el lugar que merece en la construcción de un país libre y soberano», dijo Staiti.

Desde Santa Fe, Claudia Baigorria, integrante de la Mesa Nacional de la Conaduh, contó que el movimiento universitario vuelve a las calles bajo la premisa de que con este presupuesto es imposible el funcionamiento de las universidades nacionales y denuncia que los salarios están en su piso histórico: «Desde hace más de 40 años que no tenemos este nivel laboral tan deplorable».

Las razones de la movilización vuelven a ser que se apruebe una ley de financiamiento docente que permita el sostenimiento de las casas de estudio y garantice salarios dignos para sus trabajadores. La ley de financiamiento había sido votada por los y las legisladoras, pero vetada por el presidente Javier Milei. «En esta ocasión, el proyecto se ha reelaborado. Argentina no está atravesando una situación deficitaria, muy por el contrario tenemos superávit fiscal y eso también es debido al gran esfuerzo que está haciendo todo el pueblo argentino sobre el cual recae absolutamente la mayor parte del sostenimiento de las cuentas públicas», explica Baigorria. 

Más del 85% de los salarios docentes están bajo la línea de pobreza: un docente con dedicación simple (9 horas semanales), con 20 años de antigüedad, no llega a los 250.000 pesos. «El congelamiento salarial es infernal. Los alimentos y el costo de vida han seguido aumentando y por ende los precios en góndola hacen que muchas veces el sostenimiento de la familia con el incremento de servicios, de tarifas, de alquileres, sea casi imposible», agrega Baigorria.

Conferencia. Autoridades del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y representantes de la comunidad educativa, en la rueda de prensa de este lunes 23 de junio.

Foto: Prensa CIN


De mal en peor
Las becas estudiantiles, que permitían a muchos alumnos seguir estudiando, también han sido congeladas a valores históricos: «Tanto las becas Progresar como las becas Manuel Belgrano están congeladas en 30.000 pesos, con lo cual les estudiantes no pueden ni siquiera sostener 20 pasajes de colectivo durante el mes, así que muchísimo menos pagar alquiler o alimentarse». 

Y otro de los fenómenos menos difundidos es el éxodo de docentes e investigadores: «Estamos asistiendo nuevamente a un fenómeno no deseado, que es la migración, el éxodo de profesionales calificados de nuestra universidad, que, según relevamientos realizados por el CIN, se estima más o menos en más de 10.000 profesionales docentes que están abandonando las aulas», dice Claudia. Por otra parte, los bajos salarios hacen que sean cada vez menos los profesionales que se reciben y quieren dedicarse a la docencia universitaria. «Y esto evidentemente redunda en un deterioro de la calidad de la enseñanza, además de que los docentes se ven obligados a tomar nuevos empleos. El poliempleo o pluriempleo ocurre en todas las áreas de todos los sectores de la clase trabajadora, pero se da muy marcadamente en el sistema universitario nacional», detalla Baigorria.

Por todas estas razones, porque el sistema público de educación universitario corre serio peligro, es que los y las docentes universitarias van a un paro de 48 horas y el jueves 26 harán una marcha de antorchas en el Palacio Sarmiento, en la calle Pizzurno, frente al antiguo Ministerio de Educación de la Nación para reclamar la urgente convocatoria a las paritarias sectoriales, que desde el mes de octubre del año pasado no se reúnen, y también para visibilizar la urgente necesidad de un financiamiento universitario que pueda sostener a todas las universidades del país. En palabras de Claudia Baigorria: «Vamos a hacerlo en todas las universidades para que en cada provincia también los legisladores y las legisladoras nacionales que representan a ese país federal tomen conciencia de la importancia que supone que vayan a dar quórum a la próxima para poder dar tratamiento a esta ley y que salga con dictamen urgente, con despacho de Comisiones de educación y de presupuesto y que se pueda dar este tratamiento y aprobación en el plenario tanto de la Cámara de Diputados como de la Cámara de Senadores. Y advertimos también que el conflicto se va a profundizar si es que nuevamente Milei arremete contra la universidad pública vetando una nueva ley de financiamiento universitario».

Durante la jornada del jueves 26, aspiran a juntar un millón de firmas en respaldo al proyecto. La adhesión también puede expresarse de manera virtual, en el sitio del CIN: https://www.cin.edu.ar/yo-apoyo-la-ley-de-financiamiento-universitario/. Joaquín Carvalho, presidente de la FUA, explica: «Este jueves tenemos que ser miles en todo el país, acompañando el millón de firmas que tenemos que alcanzar, para que toda la sociedad entienda que la universidad tiene que ser una prioridad». 

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