20 de febrero de 2024
Cooperativas integradas por pequeños productores proponen una alternativa en una de las áreas más sensibles a los vaivenes de la economía.
Rol social. La UTT cuenta con almacenes ubicados en Capital Federal, Avellaneda y La Plata.
Foto: Juan Pablo Barrientos
En un contexto inflacionario que no da tregua, donde las grandes cadenas de supermercados y los monopolios del sector alimenticio hacen su negocio con la especulación, los pequeños productores, cooperativas y comercializadoras de la economía solidaria proponen una alternativa a los consumidores.
Desde la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) sostienen que para generar una real transformación social se debe entender el rol que ocupa la producción de alimentos. Por eso, sus almacenes son un nexo directo entre el productor y el consumidor. Para garantizar el acceso a alimentos sanos y agroecológicos, en la última asamblea de diciembre decidieron sostener los precios actuales hasta marzo. Josefina, integrante de la coordinación nacional de la UTT, explica: «No estamos exentos al ajuste que hace este Gobierno, somos también víctimas con los aumentos impresionantes que sufrimos en la logística, eso nos impacta negativamente, pero sabemos que con esta situación es difícil tener una dieta equilibrada, las familias están eligiendo qué comprar y todo se complica –dice la cooperativista–. A quienes ya no podían acceder les cuesta más, pero también vemos que cada vez son más las familias en situación crítica. Nuestra estrategia es que cada vez más gente se acerque a nuestros locales, así no tenemos que aumentar los precios. El alimento es nuestro objeto de lucha, es un derecho con el que no se especula».
La UTT cuenta con cuatro almacenes, dos en Capital Federal, uno en La Plata y otro en Avellaneda. En todos ellos hacen descuentos a jubilados, embarazadas, estudiantes y personas con discapacidad los días martes y jueves, y un 40% de descuento con Cuenta DNI todos los días.
Precios razonables
Otro caso similar es el de Minka Mercado Cooperativo, que desde 2019 se encarga de la comercialización de productos realizados por cooperativas y emprendedores autogestivos. Tienen un puesto en el Mercado de Ensenada con alimentos de primera necesidad y un local propio en La Plata, donde comercializan cosmética natural, accesorios, indumentaria y juegos inclusivos y con elementos sustentables.
«Apostamos a los emprendedores y las cooperativas para sostenernos entre todes. Las personas que conformamos Minka proponemos ideas para poder acercar un precio razonable al producto y al trabajo que hay detrás. Tenemos descuentos todos los días para afiliados a distintos gremios y para jubilados. También hay descuentos en las compras en efectivo», comenta Luz Martínez, integrante de Minka. En su cuenta de Instagram @minkamercadocoop puede seguirse su actividad y ver los productos disponibles.
Por su parte, la cooperativa Consumo Solidario es una comercializadora integrada por nueve trabajadores vinculados con productores agroecológicos de todo el país y que tienen sede en el Mercado de Bonpland de la Ciudad de Buenos Aires. Actualmente impulsan grupos de consumo, una modalidad para realizar compras colectivas de productos de primera necesidad a precio mayorista. Puré de tomate, yerbas, quesos y legumbres son algunos de los productos que el consumidor puede adquirir sin sufrir la especulación que reina en las grandes cadenas de supermercados. Además de ahorrar en sus compras, estos grupos tendrán la posibilidad de acceder a talleres, encuentros y visitas a las quintas de producción agroecológica. Su página web es colectivosolidario.org.
«Trabajar sin especular, ese es nuestro motor. Protegemos a los productores y solo aumentamos cuando nos aumentan, y así protegemos también al consumidor. Tenemos precios justos, sí. Eso no quiere decir que nuestros precios siempre sean los más bajos, son los más justos para los productores y para los consumidores, en un escenario inflacionario donde quienes apostamos a la economía solidaria somos los más afectados», asegura Pamela Fadiga, de Colectivo Solidario.
Mientras las grandes empresas no paran de aumentar, mientras las cadenas de supermercados remarcan y vacían góndolas, mientras todo eso sucede, otra economía es posible: la que se mueve de forma solidaria.
