22 de enero de 2025
Tomar café costará cada vez más caro: el calor y las lluvias irregulares están castigando a los cafetales de Brasil, el mayor productor y exportador mundial del grano. Según estudios oficiales, Brasil vivió en 2024 su año más caluroso desde el primer registro en 1961. También padeció un récord de incendios forestales en 14 años, la mayoría de origen humano y agravados por la sequía. La ciencia vincula ambos fenómenos, las temperaturas elevadas y la sequía, al calentamiento global. Con 54,2 millones de sacos de 60 kilogramos producidos en 2024, según un balance difundido este martes por la Compañía Brasileña de Abastecimiento (Conab), Brasil vio caer un 1,6% su cosecha respecto de 2023.