27 de marzo de 2015

Los mexicanos frenaron la ley del agua propuesta en la Cámara de Diputados bajo el argumento de que violaba los derechos humanos. Académicos y ONG están exigiendo un debate participativo sobre el futuro del recurso estratégico. Entre los puntos más criticados están las ventajas que se les otorga a quienes utilicen la fracturación hidráulica para obtener gas del subsuelo de la tierra y a las grandes mineras. Aseguran también que las auditorías a las empresas no son vinculantes y que con la sola realización de obras de conexión podrían utilizar cuencas nacionales, lo cual podría crear desabastecimiento en las pequeñas comunidades, como ya ocurre en algunos distritos.